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La Fórmula 1 confirmó lo que parecía un rumor lejano hace apenas unos días: Checo Pérez volverá a la parrilla en 2026 de la mano de Cadillac, acompañado por Valtteri Bottas. La dupla reúne más de 500 grandes premios de experiencia y 16 victorias, credenciales que aseguran fiabilidad para un proyecto que necesita consolidarse desde cero.
La escudería estadounidense será el undécimo equipo del campeonato, con Ferrari como suministrador de motores en la nueva era híbrida. Su llegada coincide con la revolución técnica que promete reordenar las fuerzas de la categoría, evocando lo sucedido en 2024.
El camino de Cadillac hacia la F1
Cadillac logró finalmente la aceptación de la FIA después de que Michael Andretti se retirara del proyecto en 2025. La dirección quedó en manos de Graeme Lowdon, con experiencia previa en Virgin y Manor, y bajo el respaldo de TWG Global. El objetivo era claro: apostar por nombres consolidados en lugar de arriesgar con un debutante de IndyCar, como Colton Herta, que estuvo cerca de firmar.
La elección de Pérez y Bottas responde a una estrategia conservadora pero eficaz: asegurar un desarrollo estable del monoplaza. Ambos aportan experiencia técnica y constancia en pista, dos factores cruciales para una escudería que inicia su camino con expectativas elevadas entre las mejores apuestas F1.
Impacto de Checo en México y Estados Unidos
El regreso de Checo Pérez no solo tiene un peso deportivo, sino también comercial y cultural. El piloto de Jalisco es uno de los pocos capaces de llenar tribunas en tres circuitos distintos: Ciudad de México, Austin y Las Vegas. Su presencia garantiza un impacto inmediato en la afición y en los patrocinadores, encabezados por el conglomerado de Carlos Slim.
En este contexto, el entusiasmo crece de cara al futuro. Los aficionados mexicanos ya proyectan lo que será verlo nuevamente en el Gran Premio de Ciudad de México, una cita que año tras año despierta pasión y que será clave para quienes buscan apuestas en el Gran Premio de Ciudad de México. Asimismo, la dupla con Bottas abre un nuevo abanico de análisis para los aficionados en un campeonato que promete ser tan impredecible como vibrante.